Divulgación del proyecto de sustentabilidad ambiental

 

ÍNDICE

  1. Antecedentes –

  2. Introducción –

  3. Justificación

  4. Propósitos

  5. Objetivos generales y específicos

  6. Recursos y recursos materiales

  7. Metodología a emplearse

  8. Anexos

  9. Rol de actividades

  10. Entrevistas

  11. Entrevista persona encargada del reciclaje

  12. Entrevista personal sobre mi proyecto: Padre de Familia y Directivo

  13. Evidencias

  14. Congruencia y pertinencia

  15. Guía de observación

  16. Elementos de un proyecto (indicadores cuantitativos y cualitativos)

  17. Elementos del cambio y transformación en el proyecto de sustentabilidad

  18. Vicisitudes y acontecimientos durante el proyecto de sustentabilidad

  19. Reflexiones finales

  20. Modelo de seguimiento (aspectos a evaluar)

  21. Inicio y término del Proyecto de Sustentabilidad

  22. Mejoras en el entorno social

  23. Creación de empleos u otros beneficios

  24. Expectativas que esperarías como estudiante de las autoridades

  25. Decisiones que podrían tomar las autoridades educativas

  26. Conclusiones y sugerencias

  27. Referencias 















  1. Antecedentes.

La historia de los huertos escolares en México se remontan oficialmente a 1922, cuando se establecen las primeras parcelas escolares, principalmente en zonas rurales. Estas parcelas eran terrenos asignados por ejidos a las escuelas para realizar actividades agrícolas y educativas, y su operatividad fue regulada en el Código Agrario de 1934 por la Secretaría de Educación Pública y el Departamento Agrario. A partir de 2017, con la implementación del Nuevo Modelo Educativo y la Autonomía Curricular, los huertos escolares volvieron a cobrar relevancia, ahora con un enfoque en el cuidado ambiental y el desarrollo sostenible. 

El interés por implementar dichos huertos surge principalmente en lo educativo pues se considera un espacio de gran aprendizaje integral que contribuye a mejorar los resultados académicos, especialmente en ciencias, biología y ecología. Además, fomentan el trabajo colaborativo, la integración grupal y aprendizaje significativo a través de la práctica, no podemos dejar de lado el interés ambiental pues ante problemas como suelos contaminados, mala calidad del aire y deforestación, los huertos escolares buscan sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y por último los huertos también promueven los hábitos alimenticios saludables, la producción de alimentos orgánicos y la seguridad alimentaria. 

Entre los principales problemas que motivaron la creación de huertos escolares destacan principalmente la contaminación de suelos y agua, la pérdida de hábitos alimenticios saludables, la desconexión con la naturaleza y el entorno rural y la necesidad de fortalecer el aprendizaje en equipo. 

En México, los huertos se han implementado en diferentes niveles educativos, desde primaria hasta bachillerato y universidad. En una investigación realizada en Tabasco, participaron siete escuelas primarias, con la colaboración de docentes, directores y autoridades educativas. 

  1. Introducción. 

Un huerto escolar es un espacio dentro o cerca de una institución educativa donde los estudiantes cultivan plantas bajo la guía de docentes y, en ocasiones, con la participación de padres y la comunidad. El objetivo principal es integrar la naturaleza en la educación, permitiendo que el alumnado aprenda de manera práctica sobre agricultura, nutrición, cuidado ambiental y trabajo colaborativo. 

Mi proyecto nace a partir de la necesidad de ofrecer una educación más dinámica y significativa, que responda a los desafíos ambientales y de salud actuales. Surge como respuesta a la preocupación por la alimentación poco saludable, la desconexión con la naturaleza y la falta de espacios para el aprendizaje práctico. 

A lo largo del documento se presentará la justificación y los objetivos del proyecto, el proceso de planeación y establecimiento del huerto, las actividades didácticas y metodológicas como también los resultados esperados y criterios de evaluación terminando por las recomendaciones para la sostenibilidad y continuidad del huerto escolar. 

  1. Justificación. 

El proyecto de los huertos escolares es uno muy relevante ya que permite a los estudiantes a aprender a cultivar, cosechar y preparar alimentos de forma sostenible, promoviendo una alimentación más saludable y consciente, también fomentar la cooperación, la participación activa de toda la comunidad escolar desde una educación inicial y también contribuye a enfrentar problemas ambientales locales, como la pérdida de biodiversidad, el desconocimiento sobre el origen de los alimentos y la desconexión con la naturaleza. 

Los beneficios esperados para estudiantes, docentes y familias se pueden resumir en la siguiente tabla: 

Grupo

Beneficios principales

Estudiantes

  • Aprenden hábitos alimenticios saludables y sostenibles. 

  • Desarrollan habilidades prácticas, responsabilidad y trabajo en equipo. 

  • Mejora su rendimiento académico y habilidades cognitivas. 

  • Aumentan su conciencia y respeto por el ambiente.

Maestros

  • Disponen de una herramienta didáctica interdisciplinaria para integrar contenidos curriculares. 

  • Fortalecen la educación ambiental y enseñanza práctica. 

  • Mejoran la relación con los estudiantes y la motivación en el aula. 

Familias

  • Se involucran en actividades escolares. 

  • Adoptan prácticas alimenticias. 

  • Promueven valores de responsabilidad compartida. 


El huerto escolar es una herramienta para la educación ambiental y la promoción de la sustentabilidad que permite que los estudiantes comprendan la importancia del cuidado del suela, el agua y la biodiversidad, y adopten prácticas responsables como el reciclaje y el compostaje, también fomenta la reflexión y acción sobre los desafíos ambientales actuales, como el cambio climático y la seguridad alimentaria. 

  1. Propósitos. 

La intención general del proyecto de huerto escolar es que los estudiantes aprendan de manera práctica sobre la siembra, cultivo y consumo de frutas, desarrollando capacidades agrícolas desde edad temprana y fomentando espacios de integración y convivencia en la comunidad escolar. 

Se esperan diferentes cambios en la escuela y estudiantes que incluyen el desarrollo de habilidades prácticas agrícolas y un mayor conocimiento sobre nutrición y alimentación saludable, la sensibilización ambiental y adopción de prácticas sostenibles que contribuyan al cuidado del medio ambiente e incremento en la motivación y el aprendizaje significativo, al vincular contenidos curriculares con actividades prácticas y lúdicas. 

  1. Objetivos generales y específicos. 

El objetivo general es promover un aprendizaje significativo y desarrollo de hábitos saludables en los estudiantes mediante la implementación y mantenimiento de un huerto escolar que fomente la educación ambiental, la sustentabilidad y la integración comunitaria. 

Mientras que los objetivos específicos son el evaluar periódicamente los avances y resultados del proyecto para ajustar las estrategias y garantizar la continuidad a largo plazo, fomentar la participación activa en estudiantes, docentes y padres en el cuidado y mantenimiento del huerto como también integrar actividades educativas relacionadas con el huerto en el currículum escolar para fortalecer el aprendizaje práctico en ciencias naturales, nutrición y ecología. 

  1.  Recursos y recursos materiales. 

Categoría

Descripción

Materiales necesarios

  • Herramientas de jardinería (palas, rastrillos, azadones, regaderas) 

  • Semillas de frutas y verduras.

  • Tierra fértil y abono orgánico (compostaje) 

  • Macetas o camas de cultivo. 

  • Sistemas de riego (mangueras, aspersores o regaderas) 

  • Guantes para los estudiantes.

Recursos humanos

  • Docentes para guíar y supervisar las actividades educativas y de cultivo. 

  • Alumnos que participan activamente en la siembra, cuidado y cosecha. 

  • Padres de familia apoyando en mantenimiento, donación de materiales. 

  • Personal de apoyo escolar para la coordinación y logística. 

Apoyos externos

  • Donaciones de materiales y herramientas por parte de empresas o instituciones locales. 

  • Reciclaje de materiales para construir macetas o sistemas de riego. 

  • Asesoría técnica de expertos en agricultura. 


  1. Metodología a emplearse. 

Para hacer funcionar el proyecto del huerto escolar, se seguirán los siguientes pasos con un enfoque metodológico activo y participativo, involucrando a estudiantes, docentes y familias, utilizando diversas técnicas de evaluación. 

  1. Planeación donde se dará diagnóstico del espacio disponible junto a las condiciones ambientales de la escuela para elaborar el plan de establecimiento del huerto, pensando en la selección de cultivos, el calendario de las actividades y la asignación de responsabilidades, para esto se tiene pensado realizar reuniones con docentes, estudiantes y padres para definir objetivos, roles y recursos. 

  2. La ejecución se basará en preparar el terreno como labranza y compostaje, la siembra y cuidado de cultivos como riego, control de plagas, mantenimiento, desarrollo de actividades educativas vinculadas al huerto y fomento del trabajo colaborativo y rotación de tareas entre los participantes. 

  3. Evaluación de dar seguimiento continuo mediante observación directa y listas de cotejo para verificar cumplimiento de tareas y desarrollo de habilidades, la aplicación de encuestas y entrevistas a estudiantes para valorar aprendizajes, actitudes y participación. 

El proyecto se basa en el aprendizaje basado en proyectos, que centra el proceso educativo en la experiencia activa del estudiante, partiendo de sus intereses y promoviendo un aprendizaje significativo y multidisciplinar. Se complementa con el trabajo colaborativo, donde los estudiantes organizan su trabajo en grupos, rotan actividades, debaten y toman decisiones conjuntas, favoreciendo habilidades sociales y responsabilidad compartida. 

Los estudiantes en este caso serán protagonistas activos en todas las etapas de la creación y mantenimiento el huerto escolar, los docentes serán facilitadores del proceso, integrando el huerto en el currículo, guiando actividades y supervisando la organización, los padres colaborarán en el mantenimiento, donación de materiales y apoyo en actividades especiales mientras que el equipo directivo coordinará recursos y logísticas para garantizar la continuidad y sostenibilidad del proyecto. 

8. Anexos. 

9. Rol de actividades. 

Actividad

Responsable

Fecha

Recursos

Diagnóstico y planeación del huerto

Docentes y equipos directivo

Primer semana

Plano del terreno, materiales de escritura

Preparación del terreno

Estudiantes y padres

Segunda semana

Herramientas de jardinería, tierra, abono

Selección y compra de semillas

Docentes y padres

Segunda semana

Semillas de frijol o lechuga

Siembra en semilleros

Estudiantes con apoyo docente

Tercer semana

Semilleros, tierra, semillas, regaderas o manguera o botes con agua

Instalación de sistema de riego

Padres y personal de apoyo

Tercer semana

Mangueras, regaderas o material reciclado para realizar una regadera

Mantenimiento y riego diario

Estudiantes (roles rotativos)

Continuo (semanal)

Agua, herramientas básicas

Registro y observación del crecimiento

Estudiantes y docentes

Continuo (semanal)

Bitácoras, listas de coteja, lápices

Taller de educación ambiental

Docentes y expertos invitados

Mensual

Material didáctico, proyector, fichas técnicas

Evaluación mediante encuestas y entrevistas

Docentes

Cada bimestre

Cuestionarios, formatos de entrevista

Cosecha y preparación de alimentos

Estudiantes y familias

Según cultivo

Cestas, utensilios para cocina

Reflexión y mejora del proyecto

Comunidad escolar

Cada trimestre

Reuniones, material para presentaciones.


Se tomó en cuenta que es un calendario adaptable según el ciclo escolar y las condiciones del huerto. 

10. Entrevistas.

Se realizaron entrevista semi estructuradas a distintos miembros de la comunidad escolar para conocer sus percepciones expectativas y sugerencias en relación al proyecto del huerto escolar con el objetivo de tener diferentes opiniones de actores clave como el personal de reciclaje, padres de familia y directivos para enriquecer el diseño e implementación del huerto. 

Personas entrevistadas:

  • Encargada del reciclaje de la escuela

  • Madre de familia voluntaria

  • Director de la institución

Preguntas comunes aplicadas:

  1. ¿Qué opinas sobre la implementación de un huerto escolar?

  2. ¿Cómo crees que este proyecto puede beneficiar a los alumnos?

  3. ¿Qué aportaciones podrías o te gustaría hacer al proyecto?

  4. ¿Qué sugerencias tienes para que el huerto funcione a largo plazo?

Las respuestas fueron grabadas con el consentimiento de los entrevistados y transcritas para su análisis.

11. Entrevista a persona encargada del reciclaje. 

Entrevistada: 

Lic. Javiera Venegas - Maestra responsable del programa de reciclaje escolar. 

Resumen de la entrevista: 

“Creo que el huerto escolar es una excelente manera de complementar nuestras actividades de reciclaje. Lo que más me entusiasma es que se puede aprovechar la composta orgánica que ya producimos, y eso ayudaría a reducir aún más nuestros residuos. Estoy muy dispuesta a integrarse y aportar materiales reutilizables como botellas y envases para riego o siembra.” 

12. Entrevista personal sobre mi proyecto (Padre de Familia y Directivo). 

Padre de familia entrevistado: 

Sra. Carmen Rivera - Madre de alumno de segundo de preescolar. 

Resumen: 

“Me parece una idea muy bonita y educativa. Los niños aprenden mucho al tocar la tierra y ver cómo crecen sus plantas. Yo me hago disponible para ayudar en lo que se necesite. Me gusta que mis hijos aprendan mediante las prácticas divertidas como es el mantener el huertito.” 

Directivo entrevistado: 

Mtro. Juan Carlos Estrada - Director del plantel. 

Resumen: 

“El huerto es un excelente proyecto para fomentar la educación ambiental. Desde la dirección escolar se dará el apoyo necesario para habilitar el espacio y dar seguimiento al cuidado del mismo.” 

13. Evidencias. 

14. Congruencia y pertinencia. 

El proyecto de huerto escolar se relaciona estrechamente con el plan educativo nacional y la realidad del entorno porque integra contenidos curriculares del área de ciencias naturales, educación ambiental y nutrición, promoviendo el aprendizaje significativo y vivencial. El huerto funciona como un laboratorio al aire libre donde los estudiantes pueden observar, experimentar y comprender procesos biológicos y ecológicos, vinculando la teoría con la práctica en un contexto real y cercano a su comunidad escolar. 

Además, el proyecto responde a problemáticas locales como la falta de hábitos alimenticios saludables, la desconexión con la naturaleza y la necesidad de fortalecer valores ambientales, lo que lo hace pertinente para el entorno social y cultural de la escuela. 

El huerto escolar es un espacio que promueve la integración de estudiantes, docentes y familias, fortaleciendo la convivencia y el sentido de pertenencia. Sirve como recurso educativo transversal que contribuye al desarrollo integral de los alumnos y también ofrece beneficios prácticos, como la producción de alimentos frescos y saludables. 

Por lo tanto, el proyecto es altamente pertinente y congruente con los objetivos educativos y las necesidades del entorno constituyéndose en una herramienta valiosa para la formación integral y el desarrollo sostenible en la escuela.

15. Guía de observación. 

Instrumento 1: Guía de Observación.


Propósito: Evaluar la implementación y funcionamiento del huerto escolar, identificando aspectos positivos y áreas de mejora.

Datos Generales:


  • Fecha:


  • Hora:


  • Nombre del observador:


  • Lugar:


Aspectos a observar y criterios:


  1. Infraestructura.


  • Las camas de cultivo están en buen estado (sin daños, niveladas).


  • Herramientas disponibles (palas, rastrillos, regaderas, etc).


  • Sistema de riego funcional.


  • Espacio bien organizado para actividades.


  1. Participación.


  • Participación activa de los estudiantes.


  • Involucramiento de maestros y otros miembros de la comunidad.


  • Trabajo en equipo.


  1. Cuidado del huerto.


  • Frecuencia adecuada de riego y mantenimiento.


  • Estado saludable de las plantas (evitar plagas o enfermedades).


  • Limpieza y orden en el área verde. 



  1. Aprendizajes.


  • Aplicación de conceptos de sustentabilidad (compostaje, reciclaje, etc).


  • Promoción de valores como la responsabilidad y el trabajo en equipo.


  • Uso de métodos ecológicos (evitar uso de pesticidas químicos).


Impacto en la escuela.

5. 

  • Aprovechamiento de los productos del huerto escolar (consumo, venta o donación).


  • Percepción del huerto entre estudiantes y docentes.


  • El huerto contribuye al ambiente escolar (estética, aprendizaje, integración).


Escala para evaluar cada aspecto.


  1. Insuficiente.


  1. Necesita mejorar.


  1. Aceptable


  1. Bueno


  1. Excelente.


Comentarios finales para describir observaciones específicas y propuestas de mejora.


Instrumento 2. Encuestas sobre los Huertos Escolares.


Propósito: Recopilar opiniones y conocimientos de estudiantes, maestros o padres sobre el huerto escolar y su impacto en la comunidad escolar.

Preguntas para la encuesta:


  1. Conocimientos básicos:


¿Sabías sobre la existencia del huerto escolar antes de esta encuesta?







¿Qué tan importante consideras que es un huerto escolar para la sustentabilidad?


  • Muy importante


  • Algo importante


  • Poco importante


  • No importante


  1. Participación:


¿Participas regularmente en actividades del huerto?


  • Sí, frecuentemente


  • Algunas veces


  • No


¿Qué tipo de actividades has realizado en el huerto? (Puedes seleccionar más de una opción):

  • Preparación de la tierra


  • Siembra


  • Riego y cuidado de las plantas


  • Cosecha


  • Otra:


  1. Impacto:


¿Creés que el huerto escolar beneficia a los estudiantes en su aprendizaje sobre el medio ambiente?


  • No


  • No estoy seguro.


¿Qué beneficios has observado como resultado del huerto escolar?


  • Más interés por cuidar la naturaleza


  • Mejor trabajo en equipo entre los estudiantes


  • Mejora en la calidad de los alimentos disponibles


  • Otro:


  1. Opinión general:


¿Qué mejorarías en el huerto escolar? (Respuesta abierta)

En una escala del 1 al 5, ¿cómo calificarías el huerto escolar?


-

1

-

2

-

3

-

4

-

5


16. Elementos del proyecto (cuantitativos y cualitativos.

  1. Componentes esenciales

Recursos Financieros: Compra de semillas, herramientas y fertilizantes. 

Recursos materiales: Tierra fértil, macetas, regaderas y equipo de jardinería. 

Recursos humanos: Docentes, estudiantes y padres de familia involucrados en el proyecto. 

Recursos instrumentales: Espacio designado para el huerto, sistemas de riego y herramientas para monitoreo de crecimiento.

Actividades. 

Preparación del huerto: Diseñar el espacio y preparar la tierra para la siembra. 

Siembra y cuidado: Plantar semillas y garantizar el riego y mantenimiento adecuado. 

Evaluación de impacto: Monitorear la cantidad y calidad de los cultivos. 

Integración en la comunidad: Organizar talleres y actividades para involucrar a los padres y docentes.

Los primeros en beneficiarse son los niños que aprenden y se benefician de los cultivos, las familias reciben el apoyo alimentario y económico indirecto y mejoran su imagen y refuerzan su compromiso con la sustentabilidad. 

La organización planifica actividades semanales para el cuidado del huerto y se evalúa determinando la eficiencia en el uso de materiales y tiempo. 

17. Elementos del cambio y transformación. 

Análisis del informe: Huertos escolares. 

Indicadores y categorías para el análisis: 

  1. Cambio: 

  • Indicador: ¿Se evidencian cambios positivos en los involucrados? 

-  Sí. Los niños han desarrollado habilidades prácticas, conciencia ambiental y hábitos saludables.

     - Indicador: ¿Hay evidencia de impacto a corto y largo plazo? 

           - Sí. A corto plazo, los niños han aprendido sobre el ciclo de las plantas. A largo plazo, este aprendizaje puede influir en sus decisiones como adultos responsables con el medio ambiente. 

  1. Transformación: 

  • Indicador: ¿El proyecto transforma prácticas habituales? 

  • Sí. Ha introducido una nueva dinámica educativa que conecta a los niños con la naturaleza y fomenta el aprendizaje. 

  • Indicador: ¿Hay un cambio cultural o de mentalidad? 

  • Sí. Padres y docentes han comenzado a valorar la importancia de enseñar sustentabilidad desde edades tempranas. 

  1. Sustentabilidad: 

  • Indicador: ¿El proyecto es viable y replicable? 

  • Sí. El uso de materiales reciclados y la participación activa de la comunidad lo hacen accesible y fácil de implementar en otros contextos. 

  • Indicador: ¿Beneficia tanto el medio ambiente como a las personas? 

  • Sí. Contribuye al bienestar ambiental al reducir residuos mediante reciclaje y al bienestar personal al mejorar la relación de los niños con los alimentos saludables. 

  1. Elementos clave: 

  • Óptimos y reales: El informe identifica claramente lo esperado (un huerto funcional) y lo alcanzado (aprendizaje significativo). 

  • Causas y soluciones: Se aborda la desconexión con la naturaleza como problema y la implementación del huerto como solución. 

  • Trascendencia: Se explica el impacto educativo y ambiental a largo plazo.

El informe contiene los elementos necesarios para valorar el cambio y la transformación. Refleja cómo el proyecto ha impactado a los niños, padres y docentes, promoviendo una cultura de sustentabilidad. Además, resalta la importancia de involucrar a la comunidad en este tipo de iniciativas. 

18. Vicisitudes y acontecimientos durante el proyecto. 

Durante el desarrollo del proyecto Huertos Escolares, se presentaron varios desafíos que requirieron soluciones creativas:

  1. Falta de experiencia previa en huertos:


  • Problema: Los niños y muchos padres no estaban familiarizados con el proceso de siembra y cuidado de plantas.

  • Solución: Se implementaron actividades introductorias, como videos educativos y talleres prácticos donde los niños aprendieron a manipular herramientas y semillas.

  1. Limitaciones de recursos materiales:


  • Problema: No se contaba con presupuesto suficiente para adquirir materiales específicos.

  • Solución: Se promovió el reciclaje, solicitando botellas, tierra y otros materiales reutilizables a los padres de familia.

  1. Dificultades climáticas:


  • Problema: Algunos días fueron demasiado calurosos o lluviosos dificultando las actividades al aire libre.

  • Solución: Se organizaron actividades alternativas, como el diseño de macetas decorativas dentro del aula y observación de plantas en germinación.

  1. Desinterés inicial de algunos niños:


  • Problema: Algunos niños mostraron falta de entusiasmo al principio.


  • Solución: Se integraron juegos y competencias para motivarlos como premios simbólicos por la planta más cuidada.

19. Reflexiones finales. 

El proyecto del huerto escolar significó para mí una experiencia enriquecedora y transformadora, que permitió conectar la teoría educativa con la práctica, promoviendo un aprendizaje vivencial y colaborativo. Fue una oportunidad para fomentar en los estudiantes valores como la responsabilidad, el respeto por el medio ambiente y el trabajo en equipo, además de contribuir a mejorar sus hábitos alimenticios y su relación con la naturaleza. 

Los niños aprendieron no sólo sobre el ciclo de vida de las plantas y técnicas básicas de cultivo, sino también sobre la importancia de cuidar el entorno, trabajar de manera conjunta y valorar los alimentos frescos y saludables. Desarrollaron habilidades prácticas, mejoraron su conciencia ambiental y adquirieron un sentido de pertenencia. 

Si tuviera la oportunidad de volver a realizar el proyecto, mejoraría la planificación de las actividades para incluir más espacios de reflexión y evaluación continua. También incorporaría recursos didácticos más variados y tecnología para facilitar el seguimiento del crecimiento de las plantas y el registro de aprendizajes, buscando hacer el proceso aún más interactivo y motivador para los estudiantes. 

20. Modelo de seguimiento. 

21. Inicio y término del proyecto. 

El proyecto de sustentabilidad ambiental comenzó a inicios del segundo trimestre escolar en un colegio bilingüe, dentro del grupo de segundo de preescolar, conformado por niños y niñas de entre 4 y 5 años de edad. El objetivo fue sensibilizar a los estudiantes sobre el cuidado del medio ambiente, el respeto por la naturaleza y los procesos de cultivo de alimentos junto a la implementación de la comida sana y saludable mediante la creación de huertos escolares adaptados a su edad. 

Participaron activamente docentes, niños e incluso algunos padres de familia. Se adaptó en un espacio exterior del colegio para las actividades de siembra, riego, observación y decoración del huerto.

22. Mejoras en el entorno social. 

A través del seguimiento semanal y la observación directa se evidenciaron los siguientes logros: 

  • El 90% del grupo mostró entusiasmo constante en las actividades del huerto. 

  • Se logró completar un ciclo de crecimiento en al menos tres plantas sembradas. 

  • Se fomenta el trabajo en equipo, la paciencia y la conexión con la naturaleza. 

  • El espacio se convirtió en un lugar de reunión positivo, incluso para niños con más dificultad de socialización. 

  • Los niños fueron capaces de identificar qué plantas requerían más agua o sol. 

23. Creación de empleos u otros beneficios. 

Aunque no se generaron empleos directos, se crearon nuevas oportunidades de aprendizaje y se sembraron ideas que pueden extenderse a las familias, promoviendo huertos caseros. También se mejoró el ambiente del colegio haciéndolo más verde y acogedor. 

24. Expectativas como estudiante de las autoridades. 

Espero que las autoridades reconozcan el impacto de los proyectos escolares ambientales como herramientas formativas, no solo en el área de ciencias naturales, sino en la formación social y emocional de los niños. También sería importante que las escuelas recibieran más apoyo para mantener este tipo de iniciativas a lo largo del tiempo. 

25. Decisiones que podrían tomar las autoridades. 

  • Invertir en espacios verdes dentro de planteles educativos. 

  • Establecer alianzas con viveros y asociaciones de agricultura urbana. 

  • Promover la evaluación de estos proyectos como parte del progreso escolar. 

26. Conclusiones y sugerencias. 

Los resultados obtenidos deben compartirse entre escuelas para motivar a los docentes a replicar la experiencia. Este tipo de proyectos no requieren grandes inversiones económicas, pero sí planificación y acompañamiento institucional. 

Las autoridades educativas pueden tomar estos resultados como una muestra del valor integrar lo ambiental desde los primeros niveles escolares. La propuesta es incluir proyectos como estos dentro de los planes de mejora escolar, buscando también el apoyo de las familias y de la oportunidad para asegurar su continuidad. 

El proyecto del huerto escolar ha sido una experiencia significativa que permitió integrar el aprendizaje práctico con la educación ambiental y la promoción de hábitos saludables en la comunidad educativa. A lo largo del desarrollo del proyecto, se logró establecer un espacio funcional para la siembra y cuidado de diversas plantas, involucrando activamente a estudiantes, docentes y padres de familia. Esto fomenta el trabajo colaborativo, la responsabilidad y una mayor conciencia sobre la importancia del cuidado del medio ambiente y la alimentación saludable.

Entre los logros más importantes destacan la participación constante de los estudiantes en las actividades del huerto, la incorporación de contenidos curriculares relacionados y la producción de alimentos frescos que contribuyeron a mejorar la nutrición escolar. Asimismo, se fortalecieron los lazos entre la escuela y la comunidad, generando un sentido de pertenencia y compromiso compartido.

Sin embargo, aún queda trabajo por hacer para consolidar y ampliar el impacto del proyecto. Es necesario continuar con el mantenimiento regular del huerto, ampliar la participación de más familias y docentes, y diversificar las actividades educativas vinculadas. También es importante implementar mecanismos de evaluación más sistemáticos que permitan medir con mayor precisión los aprendizajes y beneficios a largo plazo, así como buscar apoyos externos para asegurar la sostenibilidad del huerto.

















Referencias.

Castro, R. (2015). La educación rural en México: historia y perspectivas. En Representaciones sociales de huertos escolares: Hacia la construcción de proyectos educativos desde la pedagogía crítica. Redalyc. https://www.redalyc.org/journal/416/41669727027/movil/

Vizcaíno, M. (1988). Huertos escolares como espacios para el cultivo de relaciones. SciELO México. http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-26732019000200161

FAO. (2004). Huertos escolares: La mejora de la nutrición y educación infantiles mediante programas de horticultura escolar. Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.

FAO. (s.f.). Guía metodológica para el establecimiento de huertos escolares. Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. https://openknowledge.fao.org/server/api/core/bitstreams/7182352b-2543-4c43-bd3f-bfcd7f88fc6b/content

Secretaría de Bienestar. (2005). Huertos pedagógicos. Gobierno de México. https://www.bienestar.gob.mx/sibien/index.php/sustentabilidad/20-sustentabilidad/28-huertos-pedagogicos

El Rincón Verde. (2024). Huertos escolares: Impacto positivo en la educación infantil. https://elrincon-verde.com/huertos-escolares-impacto-positivo-en-la-educacion-infantil/

Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. (2019). El huerto escolar = Educación + Alimentación + Medio ambiente. https://pcientificas.ujat.mx/index.php/pcientificas/catalog/book/117


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